La reforma laboral que ha aprobado
el gobierno nos ha hurtado la dignidad. Todos estamos asustados y en manos de
nuestros empresarios. Por esta razón la Sección Sindical
de CCOO en COPE Madrid os conmina a que asistáis a la manifestación del domingo
día 19. Será la primera de muchas, pero es fundamental que el ejecutivo
compruebe el rechazo social. De esta forma dejará el discurso permanente de que
son los sindicatos los que movilizan porque pierden poder. Somos los
trabajadores los que debemos echarnos a la calle para demostrarles que no nos
sirve, y que no somos corderos que van al matadero sin protestar. No sabemos si
servirá de mucho o de poco, pero la única batalla que se pierde es la que no se
pelea. Por los que pelearon antes para conquistar derechos, por nuestros hijos,
por nuestros derechos y por nuestra dignidad.
El gobierno del PP ha
aprobado una reforma laboral que vulnera gravemente los derechos de los
trabajadores y deja el control del mercado de trabajo en manos de los
empresarios. Lo ha hecho cuando hay más de cinco millones de parados -vamos
camino de los seis millones, como ha dicho Ignacio Fernández Toxo- y se da la
circunstancia de que los mismos que la han puesto en marcha no se han recatado
en afirmar que no servirá para crear empleo, algo que hace dudar de la
constitucionalidad de la Ley.
¿Por qué se hace una
reforma laboral que no va a crear empleo cuando el paro supera de largo el 20%
de la ciudadanía? Mucha gente piensa y dice que se trata de una sumisión total
a las órdenes recibidas desde la
Unión Europea,
que España se ha plegado a los deseos de Bruselas para que nuestros políticos
estén bien vistos y valorados en los centros de decisión del continente.
Nuestros políticos, no nuestros ciudadanos. Pero está claro que no ha sido
solamente por esto. Los empresarios han tenido mucho que ver.
La estrategia seguida
por los entornos empresariales nos dice que primero se ha intentado
deslegitimar a los sindicatos por todos los medios posibles. Con verdades
deformadas y con mentiras descaradas. Todo valía para conseguir que los
ciudadanos tuvieran la impresión de que los sindicatos no estaban para defender
sus derechos, sino para recibir subvenciones del gobierno que permitían a la
gran mayoría de sus miembros vivir sin trabajar.
Una vez logrado esto y
con el apoyo de un gobierno sin soluciones, han completado la operación. Se ha
hecho una reforma laboral que priva de derechos a los trabajadores, que los
pone en manos de unos empresarios dueños y señores de la situación porque esa
reforma ha destrozado las relaciones laborales y lo que hasta ahora era
conocido como mercado de trabajo.
Es por esto hay que
acudir a todas las movilizaciones que se convoquen en contra de la reforma
laboral. Comenzando por las del 19 de febrero en todas las capitales españolas
y muchas ciudades importantes, y siguiendo por las del 29 de febrero. Que se
manifiesten ahora para que haya marcha atrás y no se encuentren dentro de un
tiempo en esa lista de parados que va a crecer de manera imparable porque a los
empresarios no les interesa crear empleo sino simplemente aumentar sus
beneficios en esta época de crisis. Y parece que el gobierno del PP les ha dado
carta blanca para que lo consigan.